- Sus gigantescas dimensiones son de 120 mil m2, equivalentes a cubrir cinco estadios nacionales.
- Su inversión fue de US$ 34 millones y destaca por ser una de las coberturas que poseen mayor tecnología en el país al ser altamente funcional para controlar la polución, resistir sismos, auto extinguirse ante el fuego y brindar seguridad y confort a los trabajadores.
- La responsable de la obra es la empresa peruana Cidelsa, que también fue la autora de construir el domo más grande de Perú para Cementos Pacasmayo, y de la moderna cubierta del Estadio Nacional.
El mega almacén de Impala Terminals, donde se recibe más de la mitad de los minerales del centro del país, presume el techado de minerales más grande del mundo, el cual se vislumbra en la Av. Atalaya a la altura de la Av. Contraalmirante Mora y Av. Néstor Gambeta, en el Callao.
Su diseño, ingeniería y arquitectura fueron elaborados por la empresa peruana Cidelsa, que durante dos años implementó la cobertura textil – denominada tensoestructura - con sus respectivas obras civiles, sin que Impala paralice sus labores.
“El costo de la inversión fue de US$ 34 millones, 15% más económico que con un material convencional como la calamina, pero la gran ventaja de implementar la tensoestructura es que no se necesita detener la productividad de la empresa, eso es invalorable”, informó Leandro Mariátegui, gerente general de Cidelsa.
Tensoestructura
La gigantesca tensoestructura es una membrana especial basada en una estructura metálica, cuyo diseño tiene los objetivos principales de controlar la polución que se origina en la zona y proteger a los minerales de los agentes externos, como los rayos solares y la lluvia.
“Asumimos el reto de construir una cobertura con gigantes arcos y curvaturas que de lejos se ven como sillas de montar. La estética es admirable, pero destaca la funcionalidad porque evita el paso del polvo del mineral hacia el exterior y, al mismo, tiempo mantiene ventilado el ambiente interno”, opinó Mariátegui.
Sostuvo que cada módulo mide hasta 40 m de altura y posee una teatina que funciona como chimenea para expulsar el aire caliente.
Reveló que otro aspecto de la tensoestructura es la distancia entre columnas que llega a un máximo de 80m, el terreno de una cancha y media de fútbol aproximadamente. “Impala necesitaba libertad de movimiento para maniobrar sus máquinas, y le dimos un espacio libre de columnas lo que es imposible hacer con otros materiales”
Sismos e incendios
La tensoestructura en Impala es sismorresistente, ya que es ultra flexible y simboliza 25% menos peso que otros materiales. Estas dos características disipan la energía de los movimientos telúricos.
En caso de incendios, la membrana también tienen excelente respuesta ya que se auto extingue por lo que no representa peligro alguno para los trabajadores que se encuentran bajo ella.
Membrana de alta tecnología
La membrana especial es traída desde Alemania y sus características no sólo conservan los minerales que cubren, también brindan seguridad y confort a los trabajadores de Impala. Por ejemplo, permite el 70% de entrada de luz solar, por lo que no se requiere de iluminación artificial durante el día, así como impide el paso de los rayos ultravioletas lo que protege la salud del trabajador.
Debido a su cercanía al mar, la cubierta está expuesta a la corrosión; para ello la membrana se ha envuelto a la estructura metálica para reforzar los aditivos contra la oxidación que ya posee el armazón.
El gerente general de Cidelsa añadió que la forma de las cubiertas tiene un drenaje natural, ya que lluvia llega a la parte superior de las columnas, donde hay una bandeja de recepción para poder evacuarla.
Con esta gran obra, Cidelsa otorgó trabajo a cerca de 500 peruanos y se posicionó con más del 50% del mercado nacional de coberturas para almacenes en m².